El verdadero desarrollo de un país debiera medirse por el número de lectores que tiene y el número de libros que lee cada uno de ellos, no por el ingreso en dólares que correspondería a cada habitante porque lo más valioso del ser humano es su libertad y esta no se otorga, sino que se gana con el conocimiento.
En este sentido, podemos vivir en un país libre y ser esclavos de nuestra ignorancia o vivir en un país de esclavos y ser libres por nuestros conocimientos.
Las cifras nos indican que son los habitantes de los países desarrollados los que más leen. Así tenemos que Japón y Alemania son líderes a nivel mundial. En América Latina tenemos a Cuba a la vanguardia, le siguen Chile y Argentina. El Perú se ubica en los últimos lugares. Esto significa que, en nuestro país, al gran porcentaje de analfabetos absolutos, tenemos que sumarle la gran cantidad de analfabetos funcionales. Las cifras nos indican que: