Los vecinos de la residencial José Inclán, mortificados por los constantes actos delictivos que se producen en sus inmediaciones, instalaron rejas y tranqueras en las calles aledañas con la autorización del gobierno local; sin embargo, el hecho de no asegurar la presencia de un agente particular que pueda abrir las rejas cuando se requiera restringe considerablemente el tránsito de los peatones. Ante esta situación, los ciudadanos afectados recurren al Poder Judicial con una demanda de